Cami y Ale se casaron el 7 de marzo en una boda muy íntima. Después de muchísimos años juntos decidieron dar el “sí” adelante de sus familias y amigos más cercanos.
El día del casamiento empezó bien tempranito en una quinta en Pilar, un dia hermoso para sacar fotos!. Los novios se cambiaron en la misma casa intentando no cruzarse antes de llegar a la iglesia. Amigos acompañaban, cebaban mate y ayudaban a organizar todo. La ceremonia fue especial y muy descontracturada, no faltaron risas ni lágrimas de alegría. Ese día hacía mucho calor, rondando los 40 grados de sensación térmica, cielo celeste sin una sola nube y, a pesar de que había una barra de exquisitos jugos naturales y tragos para refrescarse un poco, la pileta fue más atractiva. Más que un Trash the Dress, fue un Trash the Wedding, todos los invitados terminaron en el agua, guerra de bombitas de agua, los grandes divirtiéndose como chicos y los chicos pasándola bien como siempre. La música, los tragos y la pileta no dejaban que la fiesta terminara y, según nos contaron, duró todo el domingo también. Si hacen renovación de votos de su casamiento, nos parece que en vez de fotógrafos vamos como invitados.
